sábado, 12 de octubre de 2013

UN MINUTO DE TODO POR LA NADA / Poesía de José Ignacio Restrepo



 QUE ERA YO

Tomados de las manos ella y yo,
recitábamos silencios vagos,
la sonrisa vanal que bien redime
a los que ya hace mucho no maquillan
esos seres que son
y lo que buscan,
era para nosotros el vestido,
la balaca feliz de la rutina...
En un vuelco increíble de la tarde
me dijiste que todo terminaba,
que buscabas sin más un nuevo atuendo
para tu vida, algo de aventura,
y todo se sumió en un gris profundo,
la palabra final llegó cumplida
para asistir a los dueños de esta fiesta,
como espada saliendo de su funda...
Yo tenia ese poema entre mis manos,
uno que hablaba de amor,
de perfecciones,
de felices trasbordos de las manos
en acciones capaces, perentorias,
buscándose en placeres pares,
con los ojos cerrados...
Para quién diablos escribiría yo estas líneas, 
me dije y me tomé el siguiente ron
me ardían los recuerdos muy adentro, 
cosa rara, es inútil no reconocerse
cuando llega el final,
aunque no llegue igual
para los dos...
Y te entregué el poema de mi amor,
reivindicado, con algunos tachones,
y nuevos versos, si...
Vos sos la lucha, la herramienta alzada, 
vos, la palabra hendida y desdeñada, 
la caricia furtiva que recuerdo, 
la esmeralda sin talla
cuya belleza férrea, contenida, 
no bien descrita está en textos de calle, 
ni en la vectrílocua acción de un falso docto...
Vos, caballera, tan alta, que yo tuve,
con quien visité países rescatados
de la ira y la duda,
donde estuvimos no existen pasaportes,
y pude ver con tus ojos, tú en los míos
las carencias del hombre y su llenura,
caminamos la lejana fronda, 
los desiertos infames,
entre palabras de vidrio sin frontera, 
yo en tu piel y tu alma contraparte, 
estoy feliz,
todo fin es un principio,
solo llama sí debo ir a buscarte
por que caíste y tienes las rodillas,
peladas igual que tus nudillos,
porque nada salió como esperabas
y has debido romperle sus cojones
al que pudo sin nada convencerte 
y hoy sin más te llevó,
de este hogar que tenías
que era yo...
 JOSÉ IGNACIO RESTREPO
• Copyright ©

4 comentarios:

  1. "Que era yo", y ya no eres...fuerte poema, me habla de un adiós que derrumba vidas, sueños que caen de infinito a cero. Que nobleza este verso: "sólo llama si debo ir a buscarte"...el amor siempre se reconstruye, aunque las baldosas hecha trizas se armen como un mosaico variopinto de dolores, sinsabores, alegrías, y por sobre todo volver a amar y perdonar. Quiero pensar que sólo es tu yo poético, tan pero tan frondoso poeta. Te abrazo...!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ...era mi yo poético, últimamente se hecha al lado mío para versificarme en libertad, me habla de pesados futuribles, de pasados incautos, no vividos, de presentes nefastos, dignos para habitar sin delación algún espacio censado del olvido...Te envío como bufanda mi mejor abrazo, de más está decir que hay procesión, de fríos y calores, cada quien ata a sí lo que desea.Gracias por venir Mariela.

      Eliminar
  2. Ah, cuanto me alegro, de verdad me remeciste, pensé en lo peor, pero de los "Yo Poéticos" estoy vacunada...jejé. Así somos los románticos, teatralizamos la vida a través de las letras, no sólo a ti te persiguen, los pasados, pesados y futuros inciertos, nos sucede a los seres más sensibles, aquellos que tenemos más desarrollados la intuición, lo sensitivo, y todo aquello en que se posa el amor. Gracias por la bufanda, tendrá que ser muy larga para que llegué hasta acá, ojalá me envuelva su calidez y abrigo, y viaje directo al alma, ahí donde tengo el termostato de mi refrigerador congelándome los proyectos miserables a los que sólo puedo aspirar...por ahora. Se me acortan los pasos José Ignacio, era una profecía médica, después de cinco años venía el debacle, voy en el noveno, es un regalo de alargue a la vida, espero muchos más, aunque no temo a la muerte para nada. El otro día, entre todo lo que leo, apareció esto: Naces llorando y todos ríen, muere riendo, y todos estarán llorando...lindo ¿verdad?. En eso aplico mi cotidianeidad...en reír, aunque por dentro este hecha un ovillo. No te cargo amigo...Gracias por contestar, no estuviste hoy en Face, sé te extraño, y mira vine a tu casa en madrugada, ya me voy a dormir, y me encuentro con tu respuesta...Ufff, que alivio...la imaginaba. Animo, aunque tus tristezas y cuestionamientos a la vida, dan felicidad al leerlas, porque somos muchos más que dos. Un abrazo enfundado, en aquella bufanda. Mil cariños, mañana nos palabreamos...en buena por supuesto,,jaja. P.D. despacho sin corrección, mi compu esta con la neura...brrrrrr

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. SOS una belleza de chilena, hoy te encontré sin buscarte... Mi fuerte abrazo!!!

      Eliminar